¿Qué es el sexo tántrico?
El sexo tántrico es la conexión con las zonas erógenas. Uno de sus objetivos es aprender a conquistar el cuerpo, despojándose de clichés que parecen escritos en piedra. Para disfrutar el placer en su máxima expesión es necesario trascender la genitalidad, redescubrir los cinco sentidos y abrazar la libertad de expresar a la pareja lo que le gusta, sin temor a avergonzarse.
¿En dónde nació esta práctica?
Empezó como una ciencia oculta en el Oriente. India es una de sus cunas, aunque solo para su instrucción, no para su práctica. En ese país se presenta un alto índice de violencia y esclavitud sexual contra las mujeres.
Los Beneficios
Las bases del sexo tántrico son los ejercicios de respiración, el masaje estimulante, los ejercicios de Kegel y el autotocamiento -mas no la masturbación-. Potencia el placer y propone una conexión interna con el yo y su energía. Apunta a que los orgasmos sean duraderos e intensos. Sus técnicas logran una mejor respiración y fortalecen la musculatura pubcoccígea.
“Su filosofía está llena de tabúes, mitos y leyendas. Solo el que se introduce en sus cálidas y tiernas aguas logrará descubrir su génesis. Se llevará el premio de la conquista de su propia sexualidad y la de su pareja”
¿Qué tan común es?
El interés viene creciendo desde antes de la pandemia. Precisamente, a raíz del encierro provocado por la emergencia sanitaria, los ineresados se han abocado a buscar alternativas, herramientas y hasta complementos sexuales para reavivar el deseo sexual. La cuarentena es un paréntesis que obliga reinventarse en todo sentido.
¿Qué debe tener en cuenta una pareja principiante?
Lo más importante es encontrar una guía que la sepa asesorar. No es una filosofía basada en la genitalización, sino en la experiencia del autoconocimiento. Debe iniciarse de forma individual para luego pasar a la explosación conjunta. El sexo tántrico cumple la promesa de mantener viva la llama del amor. La estimulación de las zonas erógenas lo eleva a un plano superior.
Los 9 Agujeros
El sexo tántrico trabaja con la concepción de los nueve agujeros: ojos (2), oidos (2), nariz (1), boca (1), ano (1), vagina o pene (1) y lapiel, que es un gran sensor (1). Con cualquiera se puede lograr una canalización de la energía sexual.+